Posiblemente esta la pregunta más difícil que se hacen los padres cuando se enfrentan a la decisión del divorcio, pero lo cierto es que dependiendo de las circunstancias, los padres deben hacer todo lo posible para hacer que su matrimonio funcione.
En otras palabras, los padres no deben anteponer su divorcio ante la necesidad de sus hijos detener una familia intacta.
Además, no hay nada que motive más para componer una relación, que saber lo mucho que afectará esta decisión en la futura vida de sus hijos.
Casi todas las parejas no recurren a la terapia matrimonial antes de la separación y terminan involucrándose en un divorcio solo para cubrir sus necesidades particulares.
Esto es algo lamentable porque la investigación ha demostrado que el divorcio es un proceso que deja una huella emocional en el niño, que dura incluso hasta la edad adulta.
Al contrario de lo que muchos padres creen, los niños se ven afectados por otras situaciones emocionales que casi nunca tienen que ver con el proceso en sí, sino con la vida a la que tendrán que acoplarse una vez que sus padres se hayan separado.
Esta la razón por la que los padres deben comprometerse a mantener un matrimonio no sólo para cubrir sus necesidades emocionales, sino también para cuidar de sus hijos.
Por lo tanto, cualquier idea de divorcio debe mantenerse fuera hasta no asegurarse de haber hecho todo lo posible para salvar su matrimonio.
12 razones para permanecer juntos por el bien de los niños
Durante las últimas décadas, las investigaciones han demostrado que los niños se benefician enormemente cuando son criados en un matrimonio saludable.
Éstos son algunos de los beneficios que el niño recibe en el transcurso de su vida cuando tiene la oportunidad de crecer en una familia unida.
Tendrán una menor probabilidad de:
- Divorciarse en su vida adulta
- Desarrollar problemas emocionales importantes
- Ser adictos o alcohólicos
- Andar en malas compañías y participar en conductas delictivas durante su adolescencia
- Volverse sexualmente activos en su adolescencia
- Convertirse en padres adolescentes
- Ser víctimas de abuso doméstico
Tendrán mayores posibilidades de:
- Ser exitosos académicamente
- Completar su educación universitaria
- Desarrollar una inteligencia emocional que les permita tomar buenas decisiones sobre sus relaciones
- Tener mejores relaciones con ambos padres
- Experimentar un estilo de vida más seguro para sus hijos
5 razones para no permanecer juntos por el bien de los niños
Las parejas se divorcian por muchas razones.
Pero si la única razón de su divorcio es que probablemente su matrimonio no ha cumplido sus expectativas emocionales, se ha “separado emocionalmente” de su cónyuge o simplemente está “descontento / a”, con su relación, usted debería estar haciendo todo lo posible para arreglar su matrimonio por el bien de sus hijos.
Usted debe entender que a pesar de los momentos de infelicidad o distanciamiento emocional, el matrimonio es un compromiso adquirido en el que usted debe trabajar permanentemente, y sobre todo cuando existen hijos de por medio.
Sin embargo, si existe algún tipo de abuso doméstico, abuso verbal, adicción o un comportamiento reincidente de infidelidad, puede que el divorcio sea lo mejor no sólo para ustedes sino para sus hijos.
El niño necesita un ejemplo que seguir en el seno de un matrimonio saludable, para que tenga una relación igualmente sana en su vida adulta.
Si su matrimonio está lleno de abuso, alcoholismo e infidelidad, el niño aprenderá este tipo de comportamiento que en el futuro le conducirá al fracaso en sus relaciones.
Según el sociólogo Paul Amato de la Universidad de Penn State, hay
“los niños con mayor riesgo de problemas psicológicos en su vida adulta se clasifican en dos categorías:
Los que crecen con padres que permanecen casados pero con una alta dosis de conflicto y hostilidad, y aquellos cuyos padres tienen menos conflictos pero están divorciados.”
Si su matrimonio es una relación llena de hostilidad y conflicto, el divorcio favorecerá a sus hijos de muchas maneras.
Éstas son algunas circunstancias en las que el divorcio podría beneficiar a sus hijos:
Les evitará la ansiedad causada por un matrimonio en conflicto
Los niños necesitan crecer en relaciones en la que los padres le brinden apoyo y amor. Por lo tanto, cuando uno de los padres retira al niño de un entorno altamente conflictivo y violento, le estará demostrando a ese niño que es amado y apoyado.
Las necesidades básicas de un niño incluyen sentimientos de seguridad y protección. Al divorciarse de un cónyuge violento, abusivo o alcohólico, usted se asegura de satisfacer estas necesidades básicas.
Algunas investigaciones sugieren que los niños expuestos a abuso doméstico sufren problemas de desarrollo, y no forman vínculos con sus padres. También se sabe que las tasas de «trastorno reactivo del apego «[2] son más altas en estos niños.
Cuando un niño es criado en un ambiente de alto conflicto puede volverse extremadamente vigilante como respuesta a la percepción de una permanente amenaza. El conflicto y la violencia hacen que el niño se vuelva hostil y agresivo en sus relaciones con los demás.
Básicamente, cuando se trata de un divorcio con hijos, un padre debe hacer lo que sabe que es beneficioso para ellos.
Los hijos están primero
Cuando el matrimonio es de bajo conflicto, lo mejor es mantener la familia intacta.
Si por el contrario la violencia y el conflicto son factores predominantes en el matrimonio, el divorcio mejorará la vida de sus hijos. En última instancia, la elección pertenece a los niños.
Por favor, tenga en cuenta lo siguiente:
Si sus hijos están felices y seguros en su familia, lo primero que usted debe considerar son las necesidades de ellos antes de decidir si se divorcia o no.
Por otro lado, si sus hijos están expuestos a una constante ansiedad causada por un matrimonio lleno de hostilidad, piense en el daño que les hace si usted decide permanecer en un matrimonio abusivo.